La crisis de los refugiados y la representación de las mujeres en los medios

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Escrito por Sissy Vovou, periodista*. Grècia Viernes, 20 de Mayo de 2016 19:33

Comunicación – TICS – Publicidad – Medios
A partir de octubre de 2015, más del 50% de los refugiados eran mujeres (algunas embarazadas) y niñas y niños, muchos de ellos acompañados principalmente de madres. Al acentuar la imagen de la responsabilidad familiar de las mujeres se refuerzan los estereotipos y se pierde la mirada sobre el derecho autónomo de las mujeres.

Grecia está en medio de la crisis de los refugiados que estalló de forma masiva en 2015, a pesar del hecho de que la cuestión de los refugiados y/o migrantes estuvo presente durante décadas y sigue en aumento.

Sólo en 2015, hubo un movimiento de un millón de personas, desde Turquía y el norte de África hacia Europa, principalmente por mar; unos 850.000 de ellos llegaron a las islas griegas desde Turquía, y el resto fue a Italia.

Un 65% de hombres (principalmente jóvenes) fue la composición de género hasta octubre de 2015, mientras que a partir de entonces y, poco a poco, más del 50% ya eran mujeres (algunas embarazadas) y menores, muchos de ellos acompañados de sus madres principalmente. También ha habido un gran número de menores no acompañados, en su mayoría niños en las edades de 12-17 años.

Violencia sexual y otras discriminaciones

Melissa Fleming, portavoz de ACNUR (la Agencia de las Naciones Unidas para los refugiados), subrayó en octubre de 2015 que esas mujeres y los menores no acompañados están en peligro de violencia sexual y otras formas de discriminación y que las organizaciones y autoridades responsables deberían adoptar medidas apropiadas para protegerlas.

Nuestro colectivo feminista apoya el principio de la apertura de las fronteras y de la concesión de asilo a todas aquellas personas que vienen de cualquier zona de guerra. Nuestro dinámico sitio, llamado Tomov -significa color lila-púrpura- está en cuatro idiomas, griego, inglés, francés y en cuarto lugar castellano. Nuestra contribución a subrayar este tipo de problemas e informar al público, ha sido constante.

En relación con las mujeres, los medios de comunicación más generalistas señalan  por un lado, la obligación humanitaria a apoyar a las mujeres y menores que, por supuesto es muy positivo pero, por otro lado, algunos medios, venenosos e islamófobos, insisten en señalar que las mujeres procedentes de países islámicos están más oprimidas y que los hombres son más violentos y, si vienen a Europa, van a ser un peligro para la igualdad de género y para la seguridad de las mujeres europeas.

Ola de solidaridad de la ciudadanía griega

Ha habido una enorme ola de solidaridad hacia los refugiados en Grecia durante el pasado y este año en curso, procedente de la ciudadanía, ya que la presencia del Estado era muy débil al inicio del fenómeno masivo y, a veces, totalmente ausente. Desde el comienzo de este año 2016, el Estado asumió algunas de sus obligaciones, por lo general, acompañadas por un comportamiento autoritario hacia los refugiados y las organizaciones solidarias.

Después de la firma del acuerdo entre la Unión Europea (UE) y Turquía el 18 de marzo las cosas han cambiado drásticamente. La esencia del acuerdo es disuadir a los refugiados o migrantes que vayan a Grecia o Europa y contiene una disposición, de forma que todas aquellas personas llegadas a Grecia de forma ilegal se regresarán, ya sean refugiados o migrantes.

Pero, por otro lado, para cada refugiado sirio “devuelto” (deportado, de hecho) a Turquía, otro refugiado sirio será transportado a Europa y el asilado recibirá este derecho, y por tanto, se reducirá al mínimo el poder de los traficantes, de acuerdo con el pensamiento europeo oficial que fue base para este acuerdo.

Este acuerdo es totalmente ilegal, también de acuerdo a la Convención de Ginebra, y según han denunciado muchas organizaciones internacionales, entre ellas ACNUR.

Deportación en masa de migrantes a Turquía

Sobre esta base se está llevando a cabo una deportación en masa de migrantes, principalmente, desde las islas griegas a Turquía de nuevo; por supuesto las personas protestan y muchos activistas solidarios les apoyan, o apoyan con mayor claridad el principio de dar la bienvenida a los refugiados y mantener las fronteras abiertas pero, por ello, están bajo la amenaza o represión del estado o la agresión de los fascistas, que han resurgido en los últimos días en Grecia, de forma masiva y violenta. Por supuesto habrá revueltas de los inmigrantes detenidos y el futuro es muy sombrío.

Además de la información anterior, que es en gran medida conocida, tenemos que evaluar los elementos ideológicos que se desarrollan o salen a la superficie en el curso de este proceso, que incluye grandes cantidades de migrantes/refugiados.

La mayor parte de la comprensión y de la solidaridad con los refugiados, provienen del hecho de que muchas mujeres, especialmente a partir del pasado mes de septiembre, empezaron a venir a Europa a través de Grecia, acompañadas de sus hijos e hijas sobre los que tenían responsabilidad. Muchas de ellas incluso embarazadas. También muchas mujeres dieron a luz en condiciones terribles, en tiendas de campaña, sin asistencia médica. Eso causó simpatía y comprensión por las personas que huyen de la guerra con sus familias. Por lo tanto, las mujeres eran las causantes de los sentimientos más fuertes de solidaridad, por la razón de que son madres y tienen menores a su cargo.

S’ignora el dret autònom de les dones a l’asil i el moviment

No hi va haver, en canvi, cap discussió sobre el dret autònom d’asil de les dones o de moviment fora dels seus països i això difereix molt amb l’actitud cap als homes, que són considerats ciutadans que s’allunyen de la guerra. En el marc d’aquesta mentalitat, es ressaltava molt la idea de la família que, per descomptat, segueix sent principalment responsabilitat de les dones.

L’altre element que s’ha subratllat en ocasions, és la violència contra les dones refugiades per la seva pròpia gent, com destaquen, molt sovint, diferents mitjans de comunicació, que van trobar l’oportunitat de representar la imatge d’un refugiat-violador en lloc d’expressar la seva preocupació per la seguretat de les dones refugiades davant la violència de gènere.

Es podria pensar que la família i els menors són la responsabilitat de les dones en una societat patriarcal com de la que vénen i així es mostra com una forma natural d’analitzar i presentar la realitat. Però, de fet, es posa massa èmfasi en aquest tipus de persones i relacions i es perd així la imatge de la del dret autònom de les dones.

Enfortiment de la familia patriarcal i la seva jerarquía

Enmig d’aquesta crisi que involucra tant als refugiats com a la població local en diferents formes, la idea de la família s’enforteix en ambdós costats: el que no afavoreix a les dones, ni als seus drets i, per l’altre banda, s’oblida l’anàlisi feminista que la família és el primer i fonamental nucli de la societat on s’estableixen la jerarquia, l’opressió i la discriminació.

Els elements anteriors relatius a la dona i als rols de la dona als ulls de la societat que els acull, van acompanyats d’arguments com ara que, les dones en aquestes societats es troben en una situació social inferior i sota un patriarcat més fort; així els grans grups de refugiats que arriben a Europa soscavaran els drets guanyats per les dones locals i europees.

Tals arguments ocupen una posició determinada de la preocupació ideològica més global sobre la influència dels refugiats a les nostres societats.

No tots ells són racistes, sinó que sovint mostren simplement la seva preocupació en un entorn que està canviant en les nostres societats a causa dels resultats de les guerres i els seus efectes i, per tant, imposen un canvi en la manera de pensar i de viure.

Instrumentalització de les diferències existents

En molts altres casos són conscients de la instrumentalització de les diferències existents de les persones que van a viure junts per temps desconegut, per tal de promoure o fins i tot per crear actituds racistes o xenòfobes.

Les feministes estan influenciades, per descomptat, pel clima més general i les seves pròpies preferències polítiques, per tant, no totes les persones podem estar d’acord amb la idea d’una societat oberta.

Vull tancar aquest treball subratllant la fortalesa mostrada per moltes dones activistes en el camp de la solidaritat, però també expressar el fet que aquest fenomen massiu ha mobilitzat i motivat a moltes dones a entrar en l’espai públic en forma dinàmica i molt creativa.

Sin derecho autónomo de asilo y movimiento de mujeres

No hubo, en cambio, ninguna discusión sobre el derecho autónomo de asilo de las mujeres o de movimiento fuera de sus países y esto difiere mucho con la actitud hacia los hombres, que son considerados ciudadanos que se alejan de la guerra. En el marco de esta mentalidad, se resaltaba mucho la idea de la familia que, por supuesto, sigue siendo principalmente responsabilidad de las mujeres.

El otro elemento que se ha subrayado en ocasiones, es la violencia contra las mujeres refugiadas por su propia gente, como destacan muy a menudo, diferentes medios de comunicación, que encontraron la oportunidad de representar la imagen de un refugiado-violador en lugar de expresar su preocupación por la seguridad de las mujeres refugiadas ante la violencia de género.

Se podría pensar que la familia y los menores son la responsabilidad de las mujeres en una sociedad patriarcal como de la que vienen y así se muestra como una forma natural de analizar y presentar la realidad. Pero, de hecho, se pone demasiado énfasis en este tipo de personas y relaciones y se pierde así la imagen de la del derecho autónomo de las mujeres.

Fortalecimiento de la familia patriarcal y su jerarquía

En medio de esta crisis que involucra tanto a los refugiados como a la población local en diferentes formas, la idea de la familia se fortalece por ambos lados: el que no favorece a la mujeres ni a sus derechos y, en otro sentido, se olvida el análisis feminista que la familia es el primero y fundamental núcleo de la sociedad donde se establecen la jerarquía, la opresión y la discriminación.

Los elementos anteriores relativos a la mujer y a los roles de la mujer a los ojos de la  sociedad que los acoge, van acompañados de argumentos tales como que las mujeres en esas sociedades se encuentran en una situación social inferior y bajo un patriarcado más fuerte, por lo que los grandes grupos de refugiados que llegan a Europa socavarán los derechos ganados por las mujeres locales y europeas.  Tales argumentos ocupan una posición determinada de la preocupación ideológica más global acerca de la influencia de los refugiados en nuestras sociedades.

Instrumentalización de las diferencias existentes

No todos ellos son racistas sino que, a menudo, muestran simplemente su preocupación en un entorno que está cambiando en nuestras sociedades debido a los resultados de las guerras y sus efectos y, por lo tanto, imponen un cambio en la manera de pensar y de vivir. En muchos otros casos, son conscientes de la instrumentalización de las diferencias existentes entre las personas que van a vivir juntas por tiempo desconocido, con el fin de promover o incluso para crear actitudes racistas o xenófobas.

Las feministas están influenciadas, por supuesto, por el clima más general y sus propias preferencias políticas, por lo tanto, no todas las personas podemos estar de acuerdo con la idea de una sociedad abierta.

Quiero cerrar este trabajo subrayando la fortaleza mostrada por muchas mujeres activistas en el campo de la solidaridad, pero también expresar el hecho de que este fenómeno masivo ha movilizado y motivado a muchas mujeres a entrar en el espacio público en forma dinámica y muy creativa.

Sissy Vovou es Comunicadora griega integrante del Equipo o Comité Editorial del diario electrónico https://tomov.gr/en/ (significa color lila-púrpura).   Las conclusiones del Encuentro Mediterráneo en el IEMed de Barcelona está reflejado en https://tomov.gr/en/2016/05/04/conclusions-meeting-mediterranea-14-and-april-15-2016-in-barcelona-4/
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Sissy Vovou (al centre de blanc). Foto Lídia Vilalta